Por favor… no me rompas las pelotas

Todas las personas tenemos un don que nos distingue de los animales, y es ser un hincha pelotas: una persona de la cual tiene la habilidad de poder ser insoportable y odiable frente a otras personas.

Como vos sabrás, es una cualidad sumamente negativa y cansadora para el que es víctima de esas personas que les gusta molestar o que la odien.

Pero aunque no lo creas, inclusive el tipo más bueno del mundo puede ser insoportable. No lo digo para que te sorprendas, sino para que sepas que nadie queda excluido de este mal. Es como una enfermedad social de la cual todos estamos expuestos, aunque sea padecerla en un día.

Yo lo padezco a cada rato. Inclusive yo soy un hincha pelotas en momentos y no me doy cuenta. Otras veces si soy consciente de ello y hasta me divierte como los Troll que hay en internet.

¿Qué es un Troll?. Un insoportable también. Una persona que se te aparece en Facebook y no hace otra cosa más que molestarte y ser un grano en tu culo. Y yo estoy muy seguro que una persona de ese calibre te habrás cruzado por internet, o en la propia vida real.

¿Qué hace un insoportable, que sea insoportable? Fácil: que no despierte interés.

Alguna vez les paso en su curso del colegio o universidad. Una persona que a cada rato hace preguntas y acotaciones que no llegan a ningún lado. Puede ser preguntas muy boludas o que hable muy fuerte. De cualquier manera todo se resume en no despertar interés por parte tuya.

Yo he tenido compañeros que lo único que hacían era preguntar siempre cuando la respuesta estaba impregnada en la misma pregunta (o tan solo leer la página siguiente del libro). También tuve compañeras que gritaban en el aula y eso no hacía más que ponerte cabron y comprar 2 docenas de bozales de perros para ponérselos a chicas de 17 años que nunca les pusieron un bife.

En tu grupo de amigos te habrá pasado de que hay una persona de la cual queres evitar porque no hace otra cosa más que querer llamar la atención siendo un molesto o alguien que quiere relucir lo que tiene, lo que hace o lo que va a comprar. Yo he conocido esa clase de personas.

También tenemos al típico “bully” o conocido también como “patotero” aquí en Argentina. Alguien que te molesta, provoca y abusa de ti logrando desvalorizar tu valor como persona frente a tus compañeros de curso.

DSC9236 En EE.UU, Mayhem Miller los pone en su lugar a través de Bully Beatdown

Y vos podrás decir: ¿y qué hago con alguien así?

Es acá cuando hay tantos casos distintos para tratar con un hincha pelota que sería innumerable la cantidad de soluciones para darte. Es más, por la situación que yo tuve el otro día no soy capaz de darte una solución frente a un caso particular arriba de un auto. Lamento romperte el corazón pero…yo no te puedo decir que hacer frente a un pelotudo que no entiende que estas yendo a una fiesta, y no una convención de veteranos de guerra que lucharon en Malvinas.

El otro día tuve que ir a la fiesta de 15 de la hermana de uno de mis mejores amigos. Me pedí un remis(coche que te traslada al lugar que le digas) y arregle para ir a la casa de un amigo primero. Luego yo me iba con 2 de mis amigos directamente al 15.

Viene el remis y le comento a donde tengo que ir. También le digo que llegaba tarde y bromeo con que necesitaba un Delorean para volver al pasado y estar en la casa de mi amigo, un chiste haciendo referencia a “Volver al futuro”.

Es precisamente en ese momento en que yo marque el principio del fin de mi viaje. Fue con ese chiste nerd en que el remisero se me pone hablar de leyes Fisicas.

Quien carajo me mandó a mí a subirme a un auto en el que el conductor, es un hincha pelotas que se dedica a taladrarte la cabeza de conocimiento científico, y que vos no te importa porque estas más pendiente de una fiesta.

DSCN2038Cuando termina de hablar de leyes de la Fisica, prosigue con Nietzche desprestigiándolo por uno de sus dichos en referencia a Dios. Obviamente que cuando yo digo que lo desprestigia a Nietzche, lo hace con su buen vocabulario de Argento inculto sin acudir a argumentos sólidos e ignorando que Nietzche era un filósofo, y como tal acude a metáforas y no a ser explícito.

No recuerdo muy bien como llego a hablar de la guerra de Malvinas después de que dijo que Nietzche era un tarado. Cuando seguimos todo el camino de la autopista, a mí se me cruza por la cabeza si hubiera sido mucho más fácil y rápido tomar la Av. General Paz que está a pocos metros de mi casa, y no la autopista 25 de mayo que está como a 10 km de donde yo vivo. Ósea que mientras que él me hablaba de armamento balístico usado en la guerra y que la gente habla de boludeces sin saber, yo estaba pensando porque le dije a él que decida por donde tenemos que ir a la casa de mi amigo, en vez de decirle que tomemos la General Paz que hacíamos más rápido.

Ahh claro… ya sé por qué no le dije.

Por qué no pensé que IBA A ESTAR CON EL REMISERO MAS PELOTUDO DE TODOS LOS QUE ME TOCO VIAJAR.

Entonces mientras que bajábamos de la autopista y sigue por Av. Cordoba, se me cuelga hablando de que tenía un familiar militar que había ido a la guerra, de que Capital está muy sobrepoblada y que él quería irse a vivir a una provincia para luego seguir hablando de la guerra de las Malvinas. Yo por mi parte me quedaba mirando por la ventana del auto y ver si algún alma bondadosa me podía salvar. Evidentemente nadie me iba ayudar y lo único que hice fue decir: “Ajap. Si. Claro” y pensar como hago para que deje de hablar.

Cuando estamos llegando a la casa de mi amigo, hablamos de actividades de combate, y yo le comento que hago Kick-boxing y él amaga con desvalorar el deporte que hago. Yo por suerte fui rápido al darle unos pocos argumentos que hicieron que él se retracte antes de hablar cualquier boludes sobre las artes marciales de combate. Luego el comenta que hizo Kendo, una práctica en que se usa espadas de madera y yo me preguntaba a mí mismo porque ninguno saco una Katana y le corto la lengua. Por suerte llegue a la casa de mi amigo y todo se terminó.

Yo te quiero decir una cosa a vos que estás leyendo esto y que posiblemente fuiste un grano en el culo para una persona, y que para colmo no entendiste por qué.

La respuesta es fácil: si vos le estás hablando a un adolescente que esta vestido de traje y que desde un principio te dijo que iba a ir a una fiesta, no pienses que a él le va a interesar temas de política porque tiene la cabeza puesta en otro lado. Entendelo. Taladrarle la cabeza a otra persona de lo que vos sabes no va hacer que tengas una conversación con la otra persona. Al contrario: vas a parecer un pelotudo que habla solo.

A mí me ha pasado de hablar con amigos y que me cuenten cosas que a mi realmente no me interesan hablar, y lo soluciono fácilmente con cambiar de tema. Cuando te toca un pelotudo que es una máquina de hablar y que se dedica hablar de sí mismo sin prestarte atención a tus intereses, te queda solamente hacer 2 cosas:

1-Hablarle de otra cosa e insistir con esta actitud de poder desviar el tema hacia lo que a vos te interesa, y que sobre todo, sabes que la otra persona te puede seguir la conversación.

2-Ser crudamente honesto y manifestar tu desinterés ante el tema que te está hablando, y que por favor te hable de otra cosa. Yo pensé que con quedarse callado e indiferente servía pero evidentemente no hizo más que transformar el remisero en una radio ambulante.

Yo te digo todo esto porque no quiero que pases lo mismo que pase yo. No siempre la indiferencia es buena frente a una persona que no sabe reconocer el desinterés por parte del otro.

Pero sobre todo, para que sepas que el pelotudo no se da cuenta de que es un pelotudo.

Fanatismo enfermizo

¿Qué pasa cuando una persona es una consumada fanática de algo?.

Pensalo por un minuto. Pensa en fanáticos religiosos o pensa en fanáticos de Tokio Hotel, 30 seconds to mars o cualquier otra cosa.

Así es. Cualquier cosa que se te venga a la cabeza va a ser relacionado a una persona que ya no tiene los pies ubicados a la tierra, y que para colmo le está quedando poco sentido común. Así es el fanático: una persona que no piensa otra cosa que no sea sobre lo que él adora.

¿Entonces? He regresado después de mucho tiempo tras haber rendido unos parciales de UBA y terminando yendo a ver a Megadeth. Para los que no me conocen: yo soy un fanático de Megadeth.

Veamos unos ejemplos de que tan enfermo soy.

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¿Comprenden?

Entonces tenemos el recital de esta banda en Malvinas, del cual es la costumbre acá comentar que cosas me pasaron ahí dentro del estadio. Pero yo no les voy a comentar que tal ese recital de 1 hora por qué creo que uno de mis amigos lo pudo definir muy bien.

En el momento en que estoy a punto de entrar a Malvinas, me dirijo hacia uno de los puestos de Marketing en el que venden remeras, cds y demás boludeces. Yo me compre una de las remeras pero me quedo viendo otra. La remera que compre sale $100. Adentro.

Entro al estadio y me encuentro con uno de mis amigos, y entre charlas le digo: “acompáñame, que me quiero comprar otra remera”. Voy a otro de los puestos y me la venden a $100. Adentro otra vez.

Hasta el momento llevo gastado $200.

Luego, cuando finaliza el recital, compro una botella de agua. 15 pesos me lo vende el cocacolero capitalista. Ya llevo gastado $215 pesos y yo sin noción del gasto monetario.

Salimos del estadio y decido comprar un poster como es de costumbre. $10 me lo venden. Ya llevamos $225 pesos.

Sigo caminando contento con el recital hasta que veo otra persona más pero que vende una taza chop de Megadeth para tomar cerveza. Yo la estrene el otro día con Fernet. ¿Precio?. $35. Adentro.

¿Cuánto llevo gastado?. $260.

¿Lo valió?

Si

¿Me gustó?

Si

¿Soy un enfermo?

Si